La utopía
He pasado tanto tiempo aislada en mi cabeza que al mirarme no sé cuándo soy, como una foto de una desconocida. Sólo me hallo en mis pupilas y en lo que dejaron escritas las lágrimas. Por ahí me bifurco entre Ayer y mañana Y no y no y sé que no debo. Al menos no como autoengaño. Hace tiempo que mi cuerpo está anestesiado de mi, ahogado, con la tensión a flor de piel marchita y el agua hasta el cuello. En ocasiones confundo la utopía con la realidad. Caigo en el bucle de una pesadilla que me quiere de rodillas y callada. Bajo la justificación de "mal de muchos consuelo de tontos" en lugar de deconstruir aquello de lo que pecamos, e incluso llegamos a quejarnos. Todo lo que predico pasa por el filtro de todas mis versiones, ya somos bastantes discutiendo, sino me callo: "si lo que vas a decir no es más bello que el silencio" - cállate. Y si lo que vas a decir va a amordazar la libertad de alguien, también.