Ausencia

El tiempo hace ya que se ha quedado estancado.
Me está ahogando.En lo más hondo.
No sabía el dolor que podían llegar a alcanzar las despedidas.Las de verdad,no las de "en unos meses te veo".No.Esas tienen tintes de esperanza.Las de verdad te quedan con cara de gilipollas al creer que todavía sigue en casa.Y esas queman,dentro del pecho,como la lava,mientras te resbala una diminuta lágrima por la mejilla que no sabe si gritar.Y finalmente acaba en la manga del jersey.Las demás las paras,porque sino empezará la migraña,y los recuerdos,que no sé qué chirría más.
Cualquier palabra,cualquier pequeño gesto cotidiano te trae de vuelta.Pero vuelves a escapar.Porque las despedidas de verdad no dan la opción de billete de regreso, donde debes estar.No.Y al darte cuenta es como si el tren hubiese arrancado llevándote por delante, duele el golpe.
Tal vez te olvides unos minutos,horas,días... Pero cuanto más tiempo pasa más grande es el choque cuando la sensación de tenerte aparece por sorpresa.
"El cuerpo muere,el alma permanece".Eso me suelo repetir como si fuese una nana de cuna todas las noches que tu insomnio me tiene despierta.Y sí, "tu",porque lleva tu nombre,tus huellas.

Comentarios

Entradas populares de este blog

El reinicio

El sentir